Pongamos que es primavera cuando escribo esto, abril, por qué no, hoy no nos pelearemos con el calendario. Y recordemos septiembre, cuando os hablé de otra poesía, de otro decir, queda ya lejos o más cerca si quieres, tú decides, porque ¿qué te queda ahora más cerca, la vida o la muerte? Repaso el perfil del tejado que veo desde mi ventana, donde se unen la quietud de las plantas de las terrazas y el azul del cielo, y pienso en que yo no tengo la verdad absoluta sobre esto. Pero siento que me acerco someramente a ello gracias al libro del poeta Raúl Nieto de la Torre, Leopardo, editado por Tigres de papel. En él intuyo que vida y muerte son uno. Observo la portada del libro, una silueta continuada, sin límites, sin cerrar cuerpos, de leopardo, rama y ave rapaz, ¿quién se sostiene en quién? ¿La vida en la muerte o la muerte en la vida? ¿Y somos nosotros a pesar de la muerte? ¿Es inevitable vivir, sufrir, amar, morir y vivir de nuevo?
El poeta se acerca a estas cuestiones tan abstractas, pero tan reales para nosotros, tanto que nos recorren en un escalofrío, porque no es la diferencia entre calor y frío lo que ocurre, que te da como un látigo, sino darte cuenta de repente de que estás vivo y preguntarte qué haces con esa vida, tanta vida tienes, que quizá tengas miedo de tener también tanta muerte, y quizá darte cuenta de que lo tuyo, tu existencia, es un «torpe rugido afónico» (pág. 57).
Este poemario va de sostenerse en la vida o en la muerte, y de saber que hay dolor, que existe, que hay silencios, que los puedes escuchar, que puedes escucharte.
Recuerdo la presentación del libro el pasado 31 de marzo, cuando en la lectura a tres voces casi intuyo al leopardo, símbolo de sentimiento y sensaciones esquivas, pero que siempre están ahí, aunque tú no puedas ubicarlas exactamente; pero la vida, la muerte, el silencio, el amor, el miedo, están ahí. Recuerdo que escuchaba los poemas y me parecían enigmáticos, como andar tras una pista, pero sin saber exactamente qué buscas. Y al leer estos poemas ya no de forma colectiva, sino en un acto privado, una cita personal entre el libro y yo, entre el leopardo y yo, se puede observar la enorme riqueza de imágenes y metáforas (hay puertas abiertas en jaulas vacías, ciervos atropellados, un viento que no esparce lo que mueve, un ahorcado en mitad de una casa…), del dominio de una lengua, de cómo apretarla para sacar todo lo que quiere decir. Me recordaba por momentos a Alejandra Pizarnik, por esa capacidad de colocar al verso, y a ti por consecuencia, en una posición incómoda, hablando de cuestiones muy duras, y ser capaz de mostrar una belleza que duele. Porque, ¿dónde van los pero que inician once poemas de los más de sesenta que conforman el libro? No sabemos dónde anclar ese pero y por momentos no sabemos dónde anclarnos nosotros mismos, ¿anclarnos a esta realidad que nos circunda a veces extraña y tan antinatural para nosotros?, ¿o anclarnos en nuestro interior? Y en el poemario se nos dice: «Se posa el pájaro en sí mismo, / tiene la rama dentro […] Como esa rama, acaso está la muerte / también dentro de él / y de mí mismo» (pág. 26).
Estos poemas tienen la virtud de que no se agotan en la primera lectura, sino que cada vez que los lees descubres un nuevo matiz, un mirar nuevo, y te llenan de nuevo de presagios, enigmas, intuiciones, de creer que tocas la realidad de tu alrededor. Y terminarás siempre leyendo como un mantra el último poema, que te empuja a ser tú mismo, con tu vida, tu muerte, tu rugido afónico, tu dolor y tu silencio: «Pero no dejaré que la ventana / me diga lo que debo mirar» (pág.84).
Son poemas duros, pero necesarios, porque no mirar el ataúd va a hacer que el muerto desaparezca.
POSTDATA
Eso sería bastante.
Como los hijos que se buscan
en el entierro de su padre
para decirse que no hay nadie
ya entre ellos y la muerte.
Como esas frases
que no tienen sentido
pero insisten muy altas en la noche del insomnio.
Como estrellas…
(Fragmento de poema de Leopardo, Raúl Nieto de la Torre, Tigres de papel, pág. 17)
Podría decir muchas cosas sobre este poema, pero solo diré, que te recomiendo que lo leas entero, y que lo vas a querer volver a leer una y otra vez, y cada vez aprenderás más sobre ti mismo.
FICHA TÉCNICA:
Título: Leopardo.
Autor: Raúl Nieto de la Torre.
Editorial: Tigres de papel.
Año publicación: 2017.
Páginas: 84.
Biografía del autor: Raúl Nieto de la Torre nació en Madrid en 1978.
Es licenciado en Filología Hispánica y doctor en Literatura Española por la Universidad Autónoma de Madrid.
Ha publicado cinco libros de poemas: Zapatos de andar calles vacías (2006), Tríptico del día después (2008), la antología Salir ileso (2011), con fotos de Rubén Nieto de la Torre y diseño de Marisa Núñez, Los pozos del deseo (2013) y Leopardo (2017), en Ediciones Tigres de Papel.
También ha publicado crítica literaria, narraciones breves y el ensayo El héroe de ficción y las ficciones del héroe en la obra narrativa de Luis Landero (2015). Profesionalmente, se dedica a la enseñanza de la lengua y la literatura.(1)
Notas:
(1) Biografía extraída de la editorial Tigres de papel.
Enlaces de interés:
En este enlace podéis ver la presentación del libro realizada el 31 de marzo de 2017 en la Casa del Lector del Matadero de Madrid.